Nuestro cuerpo está compuesto por millones de células que nacen, crecen, se reproducen y mueren.
La piel también está compuesta por células y algunas de estas células (melanocitos) producen melanina, sustancia que produce el tono de la piel.
En las células que componen los folículos capilares también hay melanocitos, éstos se encargan de hacer crecer el pelo de nuestro cuerpo. La melanina producida por estos melanocitos determina el color de nuestro cabello.
Pero con la edad las celulas envejecen y dejan de funcionar adecuadamente por lo que dejan de producir melanina. Esto trae como consecuencia que el cabello pierda su pigmentación dejando así el color blanco de las canas.
Las canas pueden parecer grises y no blancas pero esto se debe a que las canas se mezclan con cabellos oscuros y da el efecto de ser grisáceo.
Si bien la edad es un factor crucial para que aparezcan las canas, también depende mucho de la genética, es por ello que hay quienes a corta edad ya tienen canas en el cabello. Otros de los factores que influyen en la temprana aparición de las canas es el estrés y la alimentación.
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